Europa se realinea para sobrevivir
Pareciera
como si los tiempos de los políticamente
correctos (PC) se hubieran desvanecido en la política mundial. A un
presidente Trump dando varapalos a sus socios de la OTAN —"los tiempos en
que podíamos confiar [los europeos] en otros han quedado atrás" definió la
canciller Merkel sus resultados, tras los reclamos de Trump a sus socios para
que pagaran más su defensa pero sin comprometerse oficialmente con ella— y
haciendo que la reciente reunión del G7 —los más ricos: Alemania, los EEUU,
Japón, Canadá, Francia, Italia y el Reino Unido más la Unión Europea pero que
excluye a China y al que Rusia sólo perteneció entre 1998 y 2014— pareciera que
ahora será realmente el G7 versus 1 luego
de una reunión a la que la canciller Merkel definió como “difícil e
insatisfactorio” —comercio, cambio climático (en ambos el presidente Trump con
posiciones muy divergentes) y Rusia (con el Rusiagate escociéndole) marcaron
las enormes distancias, entre otras diferencias visibles en el comunicado
final, ése sí tan PC que vale mucho más por lo que calla que por lo que dice—,
ahora mediáticamente se une el presidente Macron criticando a su par Putin
públicamente con éste delante y el ruso, sin amoscarse, celebrando a su amiga —y
enemiga de Macron— Mme. Le Pen.
Esta
reunión cerró una semana difícil para muchos —pero que le permitió al estrenado
presidente francés hacer su debut frente sus colegas, incluido la casi pulseta
con Trump— dentro de una escenografía que podría significar la nueva Europa que
Macron y Merkel se han comprometido a reconstruir: el Grand Trianon de
Versalles, conmemorando 300 años de la primera visita de un zar —Pedro el
Grande— a un rey francés, Luis XV.
Información consultada
http://internacional.elpais.com/internacional/2017/05/25/universo_trump/1495740430_632319.html?id_externo_rsoc=TW_AM_CM
No hay comentarios:
Publicar un comentario