martes, 27 de junio de 2023

Entrevista en streaming desde ACTUAL 107.1 FM (San José-Costa Rica) sobre el panorama político actual sudamericano

 Invito a ver la entrevista en streaming que hoy desde San José de Costa Rica me hizo Claudio Alpízar Otoya sobre el panorama político actual sudamericano https://www.facebook.com/actualfm1071/videos/114446325026508 

viernes, 23 de junio de 2023

Mi opinión sobre una propuesta constitucional

 

Como la propuesta de Constitución que difundió el expresidente GSL ha sido objeto y sujeto de muchos comentarios, abordaré ese ejercicio constitucional —con bastante de atrevida insolencia mordaz.

No soy constitucionalista pero ninguno tal, así que seré osado. Donde puedo opinar algo es sobre el Congreso porque entre 2003-2005 lideré un proyecto de SUNY sobre la percepción social de cómo debería ser el Congreso boliviano: cerca de dos centenares de entrevistas a políticos y congresistas (incluidos Felipe Quispe y Evo Morales), académicos y líderes sociales, mediáticos y de opinión dieron más de 1.500 carillas archivadas en la Gran Manzana. Pasemos a la enjundia.

Lo primero es la cantidad de artículos: 194 versus 411 de 2009. Comparándola con otras cercanas: Colombia (1991) tiene 380 artículos, la ecuatoriana 2008 (2008, reformada en 2020) con 444; la venezolana (1999), 350; la argentina (1994) con 129; en la brasileña (1988) son 245, y la paraguaya (1992, enmendada en 2011) posee 291 y, descontando la argentina, la de GSL es la menos extensa (quizás por todo lo que borra).

En su propuesto artículo 2 postula que «La soberanía […] no se ejerce de manera directa ni por medio de referendos», con lo que, como en otros que mencionaré, retrocede lo avanzado de los procesos autonómicos y registrado en el artículo 11.II.1 vigente; luego en el 5.1 menciona «raza», un concepto biogenéticamente descartado para humanos, incluido quizás porque está explicitado en el artículo 6.1 de la constitución de 1994 durante el primer gobierno de GSL.

Pasando a Derechos Fundamentales, concuerdo con el artículo 6 pero Bolivia está obligada —por convenciones y tratados que ha firmado— a extender su inclusión; en garantías, repite —hasta donde me da la memoria— las establecidas en la gestión Blattmann pero sus conclusiones son muy diferentes a las propugnadas por los Juristas independientes y, en muchísimas, retroceden incluso hasta la de 1947, aún sin el Tribunal Constitucional que GSL descarta.

Al inicio GSL propone «una democracia representativa de carácter parlamentario», sin embargo —más allá del Primer Ministro, quizás tomado en su forma y atribuciones de la constitucionalidad francesa—, las atribuciones del Presidente —que no es elegido por el pueblo sino por el Congreso— son muy grandes y muy poco democráticas, al arrogarse el nombramiento de las cabezas de los Poderes Judicial y Electoral, entre otras linduras, que aprobaría el Congreso sobre propuesta única presidencial. El 32.1 menciona como principios del Servidor Público «objetividad, imparcialidad, eficacia, legalidad, jerarquía, coordinación y responsabilidad» pero no incluye el principio aristoteliano del mérito (que sí aparece en el 33).

Iré al Congreso. Mantiene la bicamaralidad —descartada en el estudio que mencioné— y obvia absolutamente la uninominalidad; desarroga al Poder Electoral la determinación de las circunscripciones y toda la geografía electoral pasa al Congreso sobre el INE.

No mencionaré el Consejo de Estado —¿francés de nuevo?— ni las atribuciones del Primer Ministro pero no saltaré la desaparición de las potestades autonómicas subnacionales: menciona que la «autonomía es la potestad normativa, ejecutiva, administrativa y técnica en el ámbito de su jurisdicción y competencia territoriales» (93.9) pero elimina la elección ciudadana de gobernadores —pasarían al Primer Ministro—, de asambleístas departamentales —los elegirían los concejales (94.1)— y de alcaldes —nuevamente los concejales (95.6). Tampoco explicita atribuciones fiscales ni de control de la policía y concentra toda la representatividad ciudadana en los partidos políticos, descartando las «agrupaciones cívicas» incluidas en el 61.4 de la constitución de 1994 y reguladas por las leyes Nº 1983/1999 de Partidos Políticos y Nº 2771/2004 de Agrupaciones Ciudadanas y Pueblos Indígenas. Por último, en varios artículos aparece mencionada «guerra», peor en el 101.1.c: «El Ejecutivo puede censurar todo medio de publicación» a pesar que el 25.1 establecía «la censura está prohibida».

Y aunque obvia muchas cosas (derechos indígenas, ambientales, sociales), le daré un positivo cuando reafirma que Bolivia es «República unitaria» pero, al fin y al cabo —la plurinacionalidad fue un invento valenciano—, Bolivia constitucionalmente (11.1) no ha dejado de llamarse República de Bolivia porque el «Estado Plurinacional» sólo nació de un Decreto Supremo (Nº 48/2009) y éstos no pueden modificar la Constitución…colorín colorado, del abuelo he acabado.

 

 Información consultada

ACADEMIA PLURINACIONAL DE ESTUDIOS CONSTITUCIONALES: “Las Constituciones Políticas de Bolivia 1826-2009”. Tribunal Constitucional Plurinacional de Bolivia, Sucre, 2018. https://tcpbolivia.bo/apectcp/sites/default/files/pdf/Librolasconstituciones1826-2009.pdf.

ASAMBLEA CONSTITUYENTE: Constitución Política del Estado (versión oficial). http://www.planificacion.gob.bo/uploads/marco-legal/nueva_constitucion_politica_del_estado.pdf.

DANNEMANN, V.: “Constituciones latinoamericanas: frecuente recambio”. Deutsche Welle, 22/10/2020. https://www.dw.com/es/constituciones-latinoamericanas-frecuente-recambio-y-sello-propio/a-55364607.

LASERNA, R.: “Autonomías y descentralización en la “Constitución de Todos””. El Deber, 22/06/2023. https://eldeber.com.bo/edicion-impresa/autonomias-y-descentralizacion-en-la-constitucion-de-todos_329635.

MENDIETA, P.: “El problema con la propuesta de Goni”. El Deber, 22/06/2023. https://eldeber.com.bo/edicion-impresa/el-problema-con-la-propuesta-de-goni_329636.

s/a: “Bolivia: Constitución política de 1947, 26 de noviembre de 1947”. https://www.lexivox.org//norms/BO-CPE-19471126.html.

s/a: “Bolivia: Constitución política de 1994, 12 de agosto de 1994. Constitución política de 1967 con reformas de 1994”. https://www.lexivox.org/norms/BO-CPE-19940812.html.

s/a: “Bolivia: Ley Nº 140, 21 de diciembre de 1961”. https://www.lexivox.org/norms/BO-L-140.pdf.

s/a: Constitución de la Nación Argentina. https://www.oas.org/dil/esp/constitucion_de_la_nacion_argentina.pdf.

s/a: “Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”. Gaceta Oficial Extraordinaria N° 36.860, 30/12/1999. https://www.oas.org/dil/esp/constitucion_venezuela.pdf.

s/a: Constitución de la República de Paraguay, 1992. https://www.oas.org/juridico/spanish/mesicic2_pry_anexo3.pdf.        

 s/a: Constitución de la República del Ecuador 2008. https://www.defensa.gob.ec/wp-content/uploads/downloads/2021/02/Constitucion-de-la-Republica-del-Ecuador_act_ene-2021.pdf.

s/a: “Constitución Política de Colombia. Actualizada con los Actos Legislativos a 2015.” Corte Constitucional. https://www.corteconstitucional.gov.co/inicio/Constitucion%20politica%20de%20Colombia%20-%202015.pdf.

s/a: Constitución Política de la República Federativa del Brasil, 1988. https://www.acnur.org/fileadmin/Documentos/BDL/2001/0507.pdf.

s/a: Constitución Política del Estado (CPE) (7-Febrero-2009). https://www.oas.org/dil/esp/constitucion_bolivia.pdf.

s/a: Ley Nº 026 del régimen electoral De 30 de junio de 2010. https://obs.organojudicial.gob.bo/assets/archivos/normativa/36ff0604a8957943a10e56da38aaf4e3.pdf.           

s/a: “Ley 0 02/02/1967. Constitución Política del Estado”. Vicepresidencia del Estado Presidencia de la Asamblea Legislativa Plurinacional. https://wipolex-res.wipo.int/edocs/lexdocs/laws/es/bo/bo025es.pdf.

s/a: “Raza”. Wikipedia, s/f. https://es.wikipedia.org/wiki/Raza.

TEDESQUI VARGAS, L.M.: “Balcázar: “Camacho en la cárcel, el modelo de voto regional no funcionó”. El Deber, 21/06/2023. https://eldeber.com.bo/edicion-impresa/balcazar-camacho-en-la-carcel-el-modelo-de-voto-regional-no-funciono_329582.

viernes, 16 de junio de 2023

Repensando II las siete crisis con Oporto

 

Como ya mencioné el interesante trabajo “Repensar la cuestión nacional: Siete tesis para la discusión” de Henry Oporto en mi anterior columna, le asignaré a ésta la consecutividad de segundo apostillado.

Las siete tesis —que debemos entender como retos para el imprescindible debate— son: a) la gobernabilidad —o, mejor: la ausencia real de ella—; b) el país fracturado que tenemos; c) la Inclusión Social; d) la Identidad Nacional en la democracia; e) el enorme y creciente desarrollo desigual entre Santa Cruz y las otras regiones; f) la construcción de la Nación Boliviana, y g) La necesidad de nuevo Contrato Social entre el Estado, los ciudadanos y las regiones. Con las disculpas que desde ya pido a Oporto, analizaré en esta edición sólo las dos primeras de ellas y dejaré el resto para siguientes entregas.

Bolivia desde su origen colonial ha padecido —como se refleja para su identidad nacional— falencias y disonancias para su gobernabilidad: eso se explica que siendo un proveedor neto de riqueza colonial —la plata de Potosí principalmente— nunca fuera centro político-administrativo —con excepción de la Real Audiencia de Charcas, un tribunal al que, como todo por acá, se le sumó y quitó territorios—; tuvo geografías que no gestionó ni gobernó realmente —las Misiones jesuíticas y luego franciscanas—; se la “pasearon” entre los virreyes de Lima y de Buenos Aires, situación que los períodos republicanos —de la plata, del estaño y del gas— tampoco integraron realmente el país; quizás lo más cerca que de ello se estuvo fue la Guerra del Chaco y su inmediato posterior pero la crisis y las siguientes etapas tampoco la cuajaron.

Pero que desde mediados del siglo xvi  —colonia, República y Estado “plurinacional”— no se haya logrado una plena gobernabilidad nacional —porque la adecuada gobernanza de un país requiere de integración— no invalida que hoy, con más fuerza, entendamos estos desafíos de gobernabilidad —como señala Oporto—vigentes desde las crisis de 2019 —crisis institucional, política y social, amén de económica desde 2015— como un problema fundamental para la vida nacional pero también son parte de un ciclo que, con altos y bajos, se extiende desde 1998 hasta nuestros días, con breves “respiros” entre mediados de 2005 —transición de Rodríguez Veltzé— hasta 2006-2007 con los conflictos de la Constituyente y el revocatorio y que reencuentro “aireando algo” alrededor de 2011 para explosionar de nuevo en 2016 con el referéndum violado y que no acaba aún.

Para aproximarse a su explicación, Oporto entonces nos recuerda la que denomina «una faceta recurrente en la historia boliviana [:] un problema crónico de inestabilidad» y que en realidad viene desde la primera llegada de europeos: preambulado en la pelea por heredad entre hermanos incas, seguido pronto de las peleas de los Pizarros con Almagro y entre sí; saltando en el tiempo —no los únicos—, los enfrentamientos de vascongados y vicuñas, las rebeliones indígenas y, ya en período republicano, el centro de gobierno a lomo de mula de los mandantes de cada período, los repetidos sablazos militares, la Guerra Federal, la del Acre y la del Chaco… y sigue la rima, incluyendo la Revolución Nacional.

Los resultados del 21F de 2016 iniciaron un período alternado de victorias coyunturales y fracasos finales que llegan a hoy, potenciando el proceso de profunda y creciente inestabilidad política: la victoria del 21F en 2016 la obliteró con creces la írrita Sentencia Constitucional Plurinacional 0084/2017 —tan ayuca del Poder que engendró a esos magistrados—; el resultado democrático de los 21 días de 2019 —al margen del interregno transicional— finiquitó, y con mucho, el 18O de 2020, y coincido con Oporto que la consecuencia es «la ruptura de un marco común de convivencia [que diré fracturado desde la misma Constituyente], la ausencia de mecanismos institucionales para la resolución de conflictos; la inexistencia de espacios de diálogo y soluciones negociadas», entre otros, que conllevan «la prevalencia de la fuerza, la presión, la intimidación. En un clima de crispación política y social, cualquier conflicto menor puede trastocarse en un choque de trenes», que Oporto ejemplifica esto con lo sucedido en 2022 a propósito de establecer la fecha del próximo Censo, a lo que yo agregaré la inexistencia de estrategias de ambos lados que conllevaron soluciones y respuestas improvisadas y el mutuo desgaste, más allá de los discursos.

¿Aún hace falta hablar de identidad nacional? Volveremos a ello.

viernes, 9 de junio de 2023

Derechas o nuevas derechas y urgentes urgencias para Bolivia

 

Con agrado intelectual —aún espero el académico— he visto que en nuestros medios aparecen nuevamente publicados con relativa frecuencia —aún poca— análisis sociales y políticos desde bases conceptuales más allá de consignas partidarias o “yoístas” con más de genitalidad que de cerebridad, análisis que saltan el común vallado limitante que, desconocedor de semánticas, imponen a la política como exclusivo sinónimo de partidismo. Extrañadas apariciones éstas porque después de los encendidos y enjundiosos debates conceptuales alrededor de la Constituyente —manoseada, es verdad, por los desembarcados de CEPS, ubicados luego en PODEMOS—, muchos de los que en ellos participaban —la generación posterior a Mansilla, Romero Pittari y Rivera Cusicanqui— se “autosilenciaron” después.

No hay dudas que para muchos de esos pensadores el soporte argumental estaba entonces hacia la izquierda, lo que era muy entendible en esas primeras fechas por el aún pretendido romanticismo de “los nuevos tiempos” tras las crisis a partir de Bánzer. Riqueza de ideas “aún cocinándose” sin rehuir debates que muy pronto se silenció; arriesgándome diré que los factores del silenciamiento estuvieron en el triunfo de una coyuntural narrativa triunfalista —bolivariana y forista—, por frustración de esos actores pensantes por lo que pasó después —Laclau sobre Bordieu— y por —no menos importante— ausencia de nuevos referentes desde otras posiciones intelectuales, apartadas de las guerrillas políticas porque éste era el espacio que el triunfalismo oficial dominaba.

Iniciaré con dos columnas de opinión de reciente publicación: “La ‘nueva derecha’” de Antonio Saravia y “Repensar la cuestión nacional: Siete tesis para la discusión” de Henry Oporto cuyas conclusiones, aunque sean análisis distintos, tienen muchos puentes comunes.

Para hablar de “La ‘nueva derecha’” —coincidente con las charlas que Agustín Laje Arrigoni, ideólogo de esa Nueva Derecha, dio en Santa Cruz de la Sierra— empezaré aclarando que las izquierdas —exitosísimas en crear y posicionar su narrativa— han estigmatizado “las derechas” como ideologías del anticomunismo de la Guerra Fría, totalitarismos y dictaduras cuál Tirano Banderas de Valle-Inclán, izquierdas que se han arrogado una imagen de modernidad y progresismo cuando hoy en día, en nuestras sociedades líquidas —huérfana de asideros tradicionales, como refería Bauman—, nacidas en la Cuarta Revolución y, por ende, colgadas de la modernidad e inmediatez tecnológica, se descreen las grandes consignas, las “políticas para rebaño” y  los mantras marxistas. Y eso es liberalismo contemporáneo mondo y lirondo: es… ¿Nueva Derecha entonces?

Retomando Saravia —y Laje—, esa sociedad líquida —descreída nos previene Durán Barba— tampoco podría ubicarse dentro del período llamado neoliberal (aunque éste, con sus aperturas al mercado e inversión, nutrió el dizque Nuevo Modelo Económico, Social, Comunitario y Productivo —capitalismo de Estado présbichiano— para que pudiera vanagloriarse de un írrito y ajeno “éxito”. Saravia conceptúa que esa Nueva Derecha «agrupa a libertarios (aquellos no progresistas), conservadores (aquellos que no sean inmovilistas o hagan de la religión su valor político fundamental) y patriotas (siempre y cuando no sean estatistas) bajo el paraguas de un conjunto básico de principios liberales».

Reconoceré que algunos de los referentes que menciona no son de mi pleno convencimiento (ni Milei ni Bolsonaro ni Trump lo logran total) y desconozco en gran medida a López Aliaga (Perú) pero sean bienvenidas nuevas ideas con valores que movilicen esperanzas y generen debate.

El otro autor, Oporto, nos advierte de siete crisis que —cual vacas flacas de José en el Génesis— se nos han instalado: Los desafíos de gobernabilidad que vienen desde la crisis de 2019; el país fracturado que tenemos; la desunión de nuestra sociedad; el Contrato Social actual fallado para edificar un Estado social, descentralizado y plural, que trajo menos democracia y un país fracturado; la brecha de desarrollo hoy entre Santa Cruz y las otras regiones; la construcción de la Nación Boliviana, y la urgencia de articular un nuevo Contrato Social entre el Estado, los ciudadanos y las regiones. Vale, y mucho, retomarlas de nuevo.


A las posiciones de Saravia, el escritor Fernando Molina opuso su descrédito en un tuit; la respuesta por Saravia ha sido una invitación al debate. Ojalá éste se dé y sea público pues la exposición argumentada de ambas posiciones opuestas enriquecería sobremanera el resurgimiento de las discusiones conceptuales.

 

Información consultada

Barranco, J: “Pero, ¿qué es la modernidad líquida?”. La Vanguardia, 09/01/2017. https://www.lavanguardia.com/cultura/20170109/413213624617/modernidad-liquida-zygmunt-bauman.html.          

Giodano, V.: “¿Qué hay de nuevo en las «nuevas derechas»?”. Nueva Sociedad, N° 254, nov.-dic. 2014. https://nuso.org/articulo/que-hay-de-nuevo-en-las-nuevas-derechas/.

https://es.scribd.com/book/560982818/La-batalla-cultural-Reflexiones-criticas-para-una-Nueva-Derecha 

https://es.wikipedia.org/wiki/Agustín_Laje.

https://es.wikipedia.org/wiki/Ernesto_Laclau

https://es.wikipedia.org/wiki/Pierre_Bourdieu

https://es.wikipedia.org/wiki/Tirano_Banderas_(novela).

https://www.amazon.com/-/es/Agustin-Laje/dp/1400238412.    

Laje, A.: “La batalla cultural: Reflexiones críticas para una Nueva Derecha”. Scrib, s/f. https://es.scribd.com/book/560982818/La-batalla-cultural-Reflexiones-criticas-para-una-Nueva-Derecha

Oporto, H.: “Repensar la cuestión nacional: Siete tesis para la discusión”. Publico.bo, s/f. https://publico.bo/opinion/repensar-la-cuestion-nacional-siete-tesis-para-la-discusion/

Portugal Mollinedo, P. “La plurinacionalidad en disonancia”. Página Siete, 07/06/2023. https://www.paginasiete.bo/opinion/columnistas/la-plurinacionalidad-en-disonancia-GY8010495

s/a: “Potencialidades y riesgos para desarrollar una economía plural en Bolivia”. https://www.bcb.gob.bo/eeb/sites/default/files/7eeb/docs/7013.pdf.   

Saravia, A.: “La ‘nueva derecha’”. Página Siete, 06/06/2023. https://www.paginasiete.bo/opinion/columnistas/la-nueva-derecha-XC7994451

Toranzos Soria, C.F.: “¡No pasa nada!”. El Deber, 07/06/2023. https://eldeber.com.bo/edicion-impresa/no-pasa-nada_327824   

Unamuno, S.: “Bolivia y la revolución cultural”. CELAG, 10/01/2019. https://www.celag.org/bolivia-y-la-revolucion-cultural/.

Vomero, F.: “¿De qué habla la derecha cuando habla de batalla cultural?”. La Diaria, 17/04/2023. https://ladiaria.com.uy/opinion/articulo/2023/4/de-que-habla-la-derecha-cuando-habla-de-batalla-cultural/.       

sábado, 3 de junio de 2023

Batacazo electoral a las izquierdas en España

  

El 28 de mayo pasado fue un Domingo Negro en España para la izquierda del Partido Socialista (PSOE) y la izquierda-más-izquierda (no me gusta llamar “ultraizquierda” porque “me suena” a stalinismo y socialismo 21… aunque muchas veces lo sean) de UNIDAS-PODEMOS y SUMAR —y para el centrismo de CIUDADANOS, que prácticamente desapareció—: convocados a elecciones autonómicas en 12 comunidades y dos ciudades autónomas y municipales en 8.131 circunscripciones, el electorado se decantó por la derecha del Partido Popular (PP) y la derecha-más-derecha de VOX —y EH Bildu (Euskal Herria Bildu, defensores del terrorismo de ETA) creció a segundo en Pamplona, la capital Navarra.

Un poco de recuento: en las elecciones de 2016, el PP gobernó sin mayoría con la abstención del PSOE — habían “renunciado” su exsecretario general Pedro Sánchez (alias Pedro Nono por su sonsonete No es No al PP)— pero en 2018 una moción de censura promovida por el PSOE —con Pedro Sánchez de vuelta— juntó el apoyo de los muchos partidos enfrentados con el PP y lo sacó del Poder, convirtiendo a Sánchez en Presidente del Gobierno —en España, quien promueve una censura que triunfe, es investido como tal. En 2019, el gobierno minoritario del PSOE fracasó cuando su Presupuesto es descartado por las Cortes —el Legislativo español— y en abril hubo elecciones generales, minoritarias para el PSOE; otro descarte presupuestal en Cortes y nuevas elecciones en noviembre y nueva victoria sin mayoría del PSOE. Y empieza el sainete sanchiano de los No es No en No es Sí: de «no podría dormir si me aliara con PODEMOS» a entrar éstos en coalición oficialista (luego UNIDAS-PODEMOS con los herederos del Partido Comunista) y el de «jamás con Bildu ni con los independentistas catalanes» al casarse con ellos para sacar lograr mayoría parlamentaria y gobernar.

 (Para lo que no sigan la política española, PODEMOS surge a partir de la Fundación CEPS —que asesoró a Chávez, Correa y Morales en sus constituyentes y gobiernos—y se aprovechó estratégicamente del movimiento Indignados en 2014 para lanzarse como partido y posicionarse).

Volvamos al 28M, base de este artículo: El PP le saca alrededor de 800 mil votos al PSOE, gana más de 2 millones de votos desde las anteriores municipales y de las 12 comunidades en discusión, el PSOE pierde seis en las que gobernaba y las gana el PP —el PSOE queda con cuatro—; el PP logra mayoría absoluta en La Rioja y Madrid —lo que además proyectó nacionalmente a Isabel Díaz Ayuso como la indiscutible lideresa conservadora (incluso sobre el presidente del PP)— y relativa en seis, necesitada de pactos —el PSOE queda con cuatro, sólo una con mayoría absoluta—; el PP gana mayoría de concejales —más de 3 mil nuevos, un 15% de crecimiento— mientras PSOE pierde el 7% —más 1.500 concejales—; VOX pasa a ser la tercera fuerza electoral, duplicando su votación anterior y sobretriplicando su presencia en los Concejos municipales.

Ante tamaño desastre, Sánchez — jugándose el Poder pero urgido de reacción frente a su descalabro propio y de sus aliados de UNIDAS-PODEMOS-SUMAR—convocó inmediatamente a elecciones generales adelantadas —corresponderían en noviembre pero esperar hasta entonces era una segura filtración mayor de votantes. De no poder alcanzar el PSOE mayoría relativa —lo que al momento le es muy inseguro— y posiblemente no sirviéndole sus actuales aliados de coalición para formar una mayoría de Gobierno, amén de perder las elecciones perderá el Poder: la consecuencia para Sánchez (quien disfrutaría muy corto de la presidencia europea que inicia el 1/7) y su entorno será la destitución y el descalabro.

¿Cómo PP y VOX lograron estos ascensos de votación? En primer lugar, ambos son partidos de derecha: yo clasificaría al Popular como derecha-centroderecha por sus matices y a VOX como claramente de derecha; por lo tanto, las diferencias no son necesariamente de fondo sino de acento y método. El PP se ha nutrido de los votantes de centro de CIUDADANOS, de los indecisos y, también, del regreso de votantes de centroderecha del mismo PP que se habían ido a votar en las anteriores al PSOE, desencantados de la “tibieza indecisa” popular del período Rajoy. Por su parte, VOX se ha beneficiado del aporte electoral de votantes hacia la derecha del PP —VOX fue un desgaje del PP— y, con importancia segura, de muchos votantes nacionalistas españoles cansados del contubernio del PSOE con los independentistas catalanes de ERC —incluso de JUNTS— y vascos de EH Bildu.

¿Una nueva etapa para la centroderecha-derecha iberoamericana? Volveré a ello.

 

Información consultada

https://as.com/actualidad/politica/espana/elecciones/municipales/

https://cnnespanol.cnn.com/2023/05/29/ganadores-perdedores-elecciones-municipales-autonomicas-espana-orix/

https://elpais.com/espana/2023-06-01/ultimas-noticias-de-las-elecciones-en-directo.html

https://elpais.com/espana/elecciones-autonomicas/2023-05-28/unidas-podemos-se-desploma-y-pone-en-aprietos-a-sumar-para-las-generales.html

https://elpais.com/espana/elecciones-autonomicas/2023-05-28/votos-y-resultados-elecciones-28m-por-comunidades.html

https://elpais.com/opinion/2023-05-31/podemos-sumar-y-multiplicar.html

https://es.wikipedia.org/wiki/Discusión:Elecciones_generales_de_España_de_noviembre_de_2019

https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_autonómicas_de_España_de_2023

https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_generales_de_España_de_2016

https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_generales_de_España_de_abril_de_2019

https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_generales_de_España_de_noviembre_de_2019

https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_municipales_de_España_de_2023

https://es.wikipedia.org/wiki/Euskal_Herria_Bildu

https://es.wikipedia.org/wiki/Fundación_CEPS

https://es.wikipedia.org/wiki/Podemos

https://resultados.locales2023.es/

https://www.abc.es/espana/psoe-reta-bildu-intentar-hacerse-alcaldia-pamplona-20230530205327-nt.html

https://www.bloomberglinea.com/2023/05/29/el-presidente-de-espana-convoca-elecciones-anticipadas-tras-derrota-en-las-urnas/

https://www.elconfidencial.com/espana/2023-05-31/psoe-pamplona-upn-desbancar-bildu-vitoria-apoyo-pp_3656153/

https://www.eleconomista.es/actualidad/noticias/12296803/05/23/mapa-de-elecciones-2023-en-directo-quien-ha-ganado-las-elecciones-autonomicas-y-municipales-en-espana.html

https://www.elmundo.es/elecciones/2023/05/28/64738c25fdddffe37d8b457e.html

https://www.elmundo.es/elecciones/elecciones-autonomicas/resultados/index.html

https://www.elmundo.es/elecciones/elecciones-madrid/2023/05/28/6473a78521efa060658b4579.html

https://www.elmundo.es/elecciones/elecciones-municipales/resultados/index.html

https://www.publico.es/politica/regalo-envenenado-pp-pnv-pse-pacto-eh-bildu-cambio-facilitarles-gobernabilidad.html

https://www.publico.es/resultados-elecciones/autonomicas

https://www.publico.es/resultados-elecciones/municipales/2023/