No voy a hablar del contenido de las encuestas porque,
aunque pudiera argüir que el artículo 116 b) de la Ley Electoral N° 026/2010 me
ampara el hacerlo hasta el miércoles 14 de octubre porque no es «difusión o publicación de estudios de
opinión en materia electoral» como restringe el artículo 130 a) de la misma
Ley pero como un medio me censuró (autocensura) la grabación de una entrevista
en vivo donde les comparaba encuestas, prefiero no hacerlo.
Pero como nada me inhibe de hablar en general, voy a
hacerlo, con la complicidad de ustedes, mis lectores.
Entre el 8 y el 11 pasados se difundieron 4 encuestas (me
abstengo de identificarlas), con lo que llegamos a 10 encuestas realizadas a
partir del 22 de julio (sólo considero las encuestas de carácter nacional
autorizadas por el TSE) y con ellas llegamos a un status de equilibrio (emocional, claro) inestable y al límite:
¿habrá segunda vuelta?, ¿alguien ganará en primera? El margen entre los síes y los noes de los dos primeros ubicados (no los menciono para evitar
susceptibilidades legales) en tres de ellas es entre uno y dos puntos
porcentuales, redondeados. Y acá va el dilema conflictual: las encuestas dan
entre 10 y 22 puntos porcentuales para indecisos: ¡el tercer “candidato con más
‘intenciones’” sería… el que no sabría aún por quién votar! Claro que esas
respuestas encuestadas pueden ser para “marear la perdiz” de los estrategas y
encuestadores pero en el atribulado y constreñido (en adhesiones) panorama
electoral pospandemia captar indecisos es la opción A+ de cualquier estratega.
(Para los que están preguntándose qué pasa con el voto exterior como alícuota
del total de habilitados, el porcentaje global es el 4,1 y los mayores aportantes
Argentina (1,9%), España (0,8%) y Brasil (0,6%), cuyas intenciones no fueron
encuestadas pero que tienen claras tendencias “históricas”.)
No voy a pedir a Argos Panoptes que nos preste alguno de sus
cien ojos para ver mejor ni que Tiresias o Calcas nos auguren. Sólo
categorizaré un poco los posibles motivadores de votos.
Primero tenemos un
“voto convencido”, aquél que un elector —fanático o no— proveerá al lema
o candidatura que le empatiza y que deviene en el voto duro, o inamovible. Luego está el “voto esperanzado”, aquél que el elector asigna a
un lema o candidatura —y muchas veces: una consigna— que moviliza sus
aspiraciones; un ejemplo claro de este voto es el “voto útil” de 2019: para
sacar al MAS del Poder y que migró de varias candidaturas hacia la que daba más
opciones de lograrlo. Por último, me referiré al “voto por miedo”.
El “voto por miedo” no es racional: es puramente
emocional. Responde a una única afirmación, que puede expresarse de diversas
formas: «me aterra la vuelta del
MAS», «no quiero que regrese el MAS»… « ya no puedo vivir bajo el MAS» (espero
que nadie se ofenda por estas alusiones tan precisas e intencionadas).
Como emoción, el miedo debe estar en la base de Maslow: el
miedo puede ser tan fuerte motivador como el hambre. Y el miedo —ése que está
al final del callejón sin salida y aparece cuando ya se pierden las opciones
con esperanza— puede, en poco días, cambiar totalmente —trastocar— los augurios
previos para una elección: ya pasó —por esperanza— en la semana del silencio
electoral del 2019, ¿y qué no pasaría por miedo?
Quizás —sólo quizás— esta semana —incluyo el domingo con el
bolígrafo frente de la papeleta— sea de muchas decisiones abruptas (quizás no).
Lo cierto es que aritméticamente —oh Diofanto— sólo hay dos candidatos —no tres—
que podrían —si el voto ciudadano lo decide— presidir Bolivia los próximos
cinco años pero también hay muchos sentimientos encontrados, asentados en la
memoria del país.
Confiemos que el parto sea sin violencia.
Información consultada
https://es.wikipedia.org/wiki/Adivinación_en_la_Antigua_Grecia
https://es.wikipedia.org/wiki/Argos_Panoptes
https://es.wikipedia.org/wiki/Calcas
https://es.wikipedia.org/wiki/Oráculo_griego
https://es.wikipedia.org/wiki/Tiresias
https://es.wiktionary.org/wiki/mantis
https://pdba.georgetown.edu/Electoral/Bolivia/Ley26-2010.pdf
https://www.oep.org.bo/wp-content/uploads/2020/08/Calendario_Electoral_EG_OCT_2020.pdf
https://www.oep.org.bo/wp-content/uploads/2020/09/Estadisticas_PEB_EG_2020.pdf
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