sábado, 24 de febrero de 2024

¡Vergonzoso que falten censistas en Santa Cruz!

 

Entre octubre y noviembre de 2022, el departamento de Santa Cruz —encabezado por su capital, Santa Cruz de la Sierra, y su mancha metropolitana— cumplieron 36 días de un paro cívico masivo para lograr la realización del Censo de Población y Viviendas en 2023. Parangonando las jornadas indignadas de octubre-noviembre de 2019 y el espíritu de victoria de Febrero de 2016 —aunque no se le menciona, agrego el exitoso movimiento crecientemente masivo de fines de 2017 e inicios de 2018 contra los intentos de graves cambios coercitivos y punitivos en el Código Penal—, los cruceños cumplimos con el paro, es cierto que con más sacrificio en algunas zonas —sobre todo las más populares, aquellas donde se trabaja para el “ganar el pan en el día a día”— que en otras (recuerdo San Martín Norte con restaurantes, cafeterías, tiendas, licorerías y cervecerías abiertas y visitadas, aunque con circulación vehicular disminuida y pitas cerrando entronques principales) pero todos convencidos que la meta —un pronto y completo Censo para saber cuánto somos, poder planificar nuestro desarrollo y, con ello, poder reclamarle al centralismo la redistribución de recursos que birla descaradamente a las regiones desde siempre— era, no sólo justa, sino imprescindible para asegurar las generaciones futuras.

Claro que mientras avanzaban los días de paro y sumaban los cabildos —una forma de democracia directa reconocida constitucionalmente pero nunca regulada: por ende, válidas sus decisiones sólo para quienes las acatábamos— y faltaba el dinero, sobre todo para los que vivían de su salario (y no sólo para “los del día a día”) y los agropecuarios —grandes, medianos y pequeños, que son decenas de miles, incluso centenares de miles en Santa Cruz— veían que su producción se perdía por los bloqueos en carreteras y caminos y los industriales —grandes, medianos y pequeños, que en Santa Cruz también son decenas de miles— no podía producir (y de ese trabajo también vive y es líder Santa Cruz) y se acumulaban deudas, salarios impagos, impuestos y se perdían contratos, algunas voces reclamaban —“acompañadas” con un coro de insultos y epítetos de “traición”— que íbamos hacia el suicidio del modelo de desarrollo cruceño, nuestro orgullo pero, sobre todo, nuestra razón histórica de no ser dependientes del Poder Central.

El paro terminó porque no tuvo nunca una estrategia perspectiva, menos una coordinación nacional con otras organizaciones afines de la Sociedad Civil. Lo que se logró en noviembre de ese año no fue una victoria sino una constatación del desgaste al que nos condenaba —y sigue— el Poder del Centralismo, porque lo acordado estaba (en gran medida) ya discutido y avanzado por el Comité Interinstitucional antes del inicio del paro. La coordinación dentro de la brigada cruceña en la Asamblea Legislativa Plurinacional —que dio el espíritu de un entendimiento de avances mutuos entre las facciones opositoras— dio paso al fiasco público de que las oposiciones (a pesar de haber sido “consensuado” uno dentro de ella) presentaran en la ALP siete u ocho Proyectos de Ley del Censo (arcismo y evismo aún no habían pasado su Rubicón y estaban coordinados). Y, como colofón, Censo en 2024 y chau 2023, el leit motiv que abanderó el paro.

En el 2023, la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno —motor y principal cerebro del Comité Interinstitucional— insistió, infructuosamente, en participar en el diseño de la boleta y la geodistribución del Censo; fracasado ello, dejó de ser actor activo. Para los Comités Cívicos fue el inicio del año fue último momento de potente convocatoria, con un desafortunado —por inútil, como ya se ha explicado en muchos análisis— intento revocatorio del (inútil también per se) Presidente del Estado.

El 23 de enero, el INE informó que Santa Cruz era el departamento con menos inscritos como Agentes Censales voluntarios: el 52,7%. Aunque la noticia debió alarmarnos entonces (a pesar de que fue poco repetida), la seguridad de que la Gabriel —actor importante en 2016, 2017, 2018 y 2019 y principal en las marchas y protestas de 2023 por el Censo— ampliamente cubriría el faltante, a lo que se sumarían la convocatoria que haría el Comité Pro Santa Cruz en sus distintas instancias y las (casi seguras por ineluctables) participaciones de la Gobernación y de la Alcaldía de la ciudad capital, principalmente, éstos dos últimos con miles de funcionarios y trabajadores, muy interesados todos (Universidad Pública, cívicos y Gobiernos subregionales) en potenciar un Censo exitoso. (El de 2012, incluso con muchísimas falencias y sin supervisión regional, nos reafirmó como la región más poblada y rica y acabó con los falsos mitos de “país indígena y rural”).

Y el 21 pasado —a poquísimo más de un mes del día del Censo— nos enteramos que para Santa Cruz aún nos faltan más de 20 mil censistas y estaban convocando censistas dentro de los condominios. Yo, con 70 años, enseguida me inscribí y en dos días ya mi condominio tiene la cantidad básica de agentes censales voluntaria y entusiastamente registrados. Entiendo que ni la Gobernación (por todo el despelote político y de mezquindades que ha tenido) ni la Alcaldía (perdida en el autoelogio personal y mediático del Alcalde) sean aptas para lograr movilizar eficientemente; incluso puedo comprender que el civismo cruceño —silenciado en su estadio de “avestruz con cabeza enterrada” en el que lleva desde inicios del 2023— sólo haga tímidas convocatorias… ¡pero la Gabriel! ¿Gastó su energía en el 2022?

En fin, tenemos que cumplir y demostrar que el esfuerzo de 2022 no fue en vano.

 

Información consultada

https://censo.ine.gob.bo/registro-de-voluntarios-para-el-censo-bolivia-supera-los-500-000-inscritos/

https://eldeber.com.bo/pais/ine-en-santa-cruz-faltan-31510-voluntarios-para-ser-agentes-censales_357069     

https://www.la-razon.com/ciudades/2024/02/21/santa-cruz-sufre-de-deficit-de-censistas-y-el-ine-anuncia-una-minga-para-reclutarlos/

https://www.lostiempos.com/actualidad/pais/20240219/reclutamiento-censo-2024-aun-faltan-mas-60000-voluntarios-nivel-nacional

https://www.oas.org/dil/esp/constitucion_bolivia.pdf

sábado, 17 de febrero de 2024

¿Y si mañana fueras Presidente de Bolivia?

 

Sé generoso conmigo, estimado lector, y sígueme la corriente. Tampoco te preocupe si ya no es Carnaval y estamos en Cuaresma porque, lamentablemente, la Luz que hoy nos guía en Bolivia es poca pero, a la vez, pareciera que vivimos un eterno Carnaval… de mascaradas.

Vamos a pensar —no seas tímido ni pretensioso— que mañana te despiertas Presidente de Bolivia. Sin necesidad de esforzarte mucho porque el Dedo te señaló: el Dedo del Rey Momo, ¡es Carnaval Permanente!, no te preocupes. Olvídate de discursos: mejor que para otros que te precedieron, nadie espera algo de ti; al final de todo, nunca pudiste decidir nada —¡ni se te ocurrió lanzar globos congelados!— antes de este Carnaval más allá de tener siempre la serpentina y la mixtura disponibles para cuando pasara el Rey Momo.

Porque piensa que fuiste muy bueno para conseguirle al Rey —Momo, claro— lo que te pedía: ¡bah!, no te era difícil, los vientos alisios te fueron favorables —¡vaya que sí!, más allá de lo que esperabas y muchísimo más de lo que soñara tu Rey… Momo— y, como decía el refrán, esos deseos “eran de coser y cantar”

Fuiste siempre muy feliz porque todos te creían Mago, un nigromante solitario que se pensaba como Midas. Eras bueno para eso; no hay como pavonearse sin riesgo.

—Me vas a cuidar el trono— te dijo el Rey Momo. Y tú asentiste. —Caliéntalo pero no te engolosines. Y haz lo que te diga, todo va a salir bien—. Mal te conocía.

Pero ¡guay!, hoy eres el Señor Presidente, el Primer Mandatario, el Excelentísimo, con guardia propia y vehículos blindados (¿nunca tuviste uno de esos juguetes, verdad?). El Hombre De La Billetera… ¡y te engolosinan los aduladores!, sobre todo si los pagas con dinero que no es tuyo ¡porque es del Estado, que te has cansado de oír que es de nadie! Pero está siendo el antiMidas, el que destruye el oro que tocas… ¿y cuando no tengas qué repartir?

Pero estate tranquilo: no eras un Cámpora (claro que “tu amigo” no era el General tampoco) y el Rey Momo es ahora una caricatura y en el juego de dos —el Gil-que-ata es un patético graffiti de una parafilia indianista— le ganas porque tienes el garrote y el monedero (no importa si vacío mientras se crean que no lo está, que escondiste algo aún). Ah, y porque la acera de enfrente está vacía, aún con más ruido que pocas nueces… pero ¿y si no lo estuviera?

Claro que aprendiste del Momo la narrativa de transliterar los fracasos como éxitos. Y bastante tiempo fuiste muy bueno en ello (concedo que no tú, sino tus artesanos de fantasías) hasta que de tanto “repetir el cántaro yendo a la fuente, que se rompió” y no te creen.

Cambiaste un mar de gases por otro de polvo blanquecino —no hablo del muy parecido del Chapare, el que también tiene su “mérito” de contención—; vendiste todo lo vendible y te endeudaste más allá del Tricentenario… ¿y qué vas a hacer? No tienes madera de Santos Bandera pero menos de Aureliano Buendía.

Oye, ¡ahuécate! Todo es pura fantasía; despierta, que esto que viviste fue sueño de un día de Carnaval y ya sabes que “los sueños, sueños son…”, ya lo dijo el sabio Segismundo. Quizás mucho acullico junto con chicha muy fermentada…

Y yo —no tú— ahora me pregunto:

—¿Qué pasará mañana? Sin Carnaval y con 40 (¿serán días, meses o años?) aún por delante. Como Castorp en la Montaña.

domingo, 11 de febrero de 2024

Bloqueos: ¿Por qué? ¿Quién se “benefició”?

 

¿Qué sucedió? Dieciséis días de bloqueos de carreteras, principalmente en la troncal de Cochabamba a Santa Cruz y algunas, hacia el final, dentro de este departamento. Pérdidas económicas al país por más de un mil millones de dólares (IBCE) —amén de la destrucción de carreteras a puro vandalismo de dinamitazos, algo que pagaremos todos excepto los bloqueadores—, cuatro fallecidos y la permanente constatación de «la calidad de país inviable que terminó de mostrar Bolivia al mundo» (Herrera: “¿Quiénes ganaron en el conflicto de los 16 días?”, Publico.bo, 8/2/2024).

¿Quién convocó los bloqueos? El expresidente Morales Ayma, irritado con sus anteriores amanuenses del TCP que en épocas de su Poder le obedecían y adulaban pero que ahora le viraban la espalda (y otras honduras) a favor de los nuevos vientos… y billeteras; el mismo Morales Ayama que amenazó como una «verdadera rebelión indígena campesina» para después negar —versión altoperuana de la dieciochesca y limeña Gatita de Mari-Ramos— que los bloqueos fueran por su convocatoria, repitiendo a quien quisiera oírlo el “¡Yo no fui!” pero en ritmo de lacrimoso huayño.

¿Quiénes perdimos? Todos los que siempre sufrimos por los bloqueos: los empresarios —grandes, medianos y chicos, los exportadores sobre todo pero también los importadores—, los asalariados, los cuentapropistas y los comerciantes, la población que no bloquea —violentada por desabastecimiento secuestrado, por inmovilización forzada, por exclusión impuesta de la atención de salud… Pero también los bloqueadores (chapareños y sus extensiones similares en San Julián) y sus movilizadores inmediatos porque (aunque cobraron ambos el diario ejercicio de “sus servicios”) se ganaron la oposición y la crítica del país.

Y Morales Ayma también perdió, y mucho. Primero, porque su falaz discurso “por la Justicia” sólo es de autoconvencimiento —que siempre haya dado muestras de supina ignorancia no le obliga a creer lo que algún oscuro asesor le sugiera decir y hacer—; segundo, porque constató que su convocatoria está disminuida y, por eso, su imagen desgastada: leído en votos, un varapalo doloroso; tercero, porque el MASEvo cada vez más regresa a los orígenes y se recircunscribe a un MAScocalero.

Después del exJefazo, el siguiente perdedor mayoritario fue el vicepresidente, intentando bloquear —con la complicidad de los genuflexos arcistas que dirigen Diputados— la Ley de Convocatoria de Elecciones Judiciales y la discusión de las autoprórrogas. Pero no debe hacerle mucha mella con los descréditos que ha ido cosechando con sus fantasiosas sugerencias “ancestrales” y, también, con sus interpretaciones racistas e indianistas (sinónimas en sí).

El tercero, Arce Catacora, quien para unos fue pusilánime al no utilizar las fuerzas del Estado para romper los bloqueos —quizás temiendo que su debilitada imagen de “buen gobernantes providencial” se desgastara más con el recuerdo de posibles Chaparinas o Sacabas— y para más aplicó “la solución del avestruz” para ganar tiempo mientras manipulaba a sus digitados en la InJusticia y en Diputados. Al final, la necesidad de inyectar liquidez al Estado aupó el temor de que la creciente furnia en la economía se llevara sus aspiraciones prorroguistas —y no por Evo—, “lo obligó a oír”.

Por último, las oposiciones que —en conjunto y a pesar de algunas posiciones y actuaciones positivas y coherentes, no comunes entre todos— no supo aprovechar ni el momento ni la tendencia.

¿Alguien ganó? Sí lo creo: el presidente del Senado quien, a pesar de la forzada renuencia del presidente nato de la Asamblea, mantuvo la coherencia constante para hacer ley de las Elecciones Judiciales y, para ello, construyó en su Cámara una mayoría favorable para lograrlo, se manejó positivamente en la reunión multipartidaria que abrió la vía de lograrlo y todo ello sin estridencias ni insultos, robando protagonismo a quien fuera su mentor (¿seguirá siéndolo?).

El viernes, en el acto en homenaje del fallecido Presidente Sebastián Piñera Echenique en el Senado de la República de Chile, el actual Presidente Gabriel Boric Font —en sus antípodas ideológicas y uno de sus principales contrarios en los sucesos de 2019— destacó los aportes manejados «con liderazgo y con audacia» del difunto Presidente para la consolidación de la democracia chilena, lo describió como un político «que nunca se dejó llevar por el fanatismo ni por el rencor» y citó al mismo extinto Presidente: «Podemos pensar distinto y es bueno que así sea, pero al mismo tiempo tenemos que aprender a caminar y a construir juntos».

Como muchos hombres y mujeres de nuestra Bolivia —espero que cada vez más— gloso a Gabriel Boric:

«¡Ya es hora que aprendamos a respetarnos en nuestras legítimas diferencias, a pactar treguas y acuerdos a pesar de historias y aspiraciones que nos separen […] poniendo el bien superior de nuestra patria por delante de nuestras discrepancias! [...] Reivindicar el legado de Sebastián Piñera es reivindicar los acuerdos, abrazar el entendimiento […]».

    

 

Referencias

https://www.youtube.com/watch?v=6A1eZGz3PGw

https://es.wikisource.org/wiki/La_gatita_de_Mari-Ramos_que_halaga_con_la_cola_y_araña_con_las_manos

https://publico.bo/opinion/quienes-ganaron-en-el-conflicto-de-los-16-dias/          

sábado, 3 de febrero de 2024

«¿Cómo estamos todos?»

 

La inocente pregunta de Elmo —la marioneta roja y peluda con ojos fijos y nariz anaranjada del conocido programa Sesame Street«¿Cómo están todos?» («How is everybody doing?») el 29 de enero en X (exTwitter: https://twitter.com/elmo/status/1751995117366296904) despertó cerca de 205 millones de Reproducciones, 150 mil Me Gusta (likes), casi 60 mil reenvíos y casi 20 mil respuestas.

¿Y por qué todas esas reacciones? (sobre todo porque, según Statista.com, X tiene 354 millones de usuarios y casi todos hemos visitado el posteo de @Elmo) ¡Por cómo sufre nuestra salud emocional en estos días, aquí y allá y acullá más! O lo que es lo mismo: cómo se afecta nuestra estabilidad mental, un resultado de la vida en la que nos toca existir.

Vayamos un momento para particularizar en Bolivia: Escasez de dólares porque nuestras exportaciones han bajado significativamente porque ya no producimos suficiente gas —consecuencia de un modelo derrochador y de una política torpe y soberbia—; en consecuencia, el “precio” local del dólar se dispara, la economía basada en dólar barato y mercado interno munido de importaciones baratas es una pesadilla ahora; ¿acaso la circulación de los narcodólares no sigue actualmente como una base económica? El fantasma terrorífico de los 80 de una crisis económica con una inflación desbocada ronda a la mayoría de los habitantes de Bolivia (a no ser que esté enroscado en el Poder o en la narcoeconomía). Motivo suficiente de inestabilidad mental, insania emocional.

Por la tele o los medios digitales nos llegan continuamente las peleas entre las facciones masistas entre los exteriores de la Vicepresidencia y la Asamblea, extendidas a la Plaza Murillo: evistas y arcistas, ceñidos sin discurtirlo los segundos vendiéndonos la idea que lo mejor para el país sería convocarlas pausadamente (no olvidamos que “mejor malo conocido que bueno por conocer” y que al Ejecutivo le convenían las tensiones entre facciones en la Asamblea para tener estancadas las decisiones de la Convocatoria para mantener a sus magistrados “ya conocidos”); a la vez, los primeros propugnando ¡Elecciones Judiciales Ya! (no olvidemos que éstas fueron un engendro de la Constituyente digitada) pero realmente buscando una pulseta donde la presunta vigencia de la fuerza le reconvalidaría al Evo su postulación ya descartada por el Constitucional...

Y los bloqueos de carreteras: La última muestra de fuerzas remanentes de Morales Ayma —los bloqueos de carreteras— nos precisan dos cosas: el método de obligar a rendirse a sus contrarios —en este caso el arcismo y el Constitucional— sacrificando por hambre a la población —su víctima final—, tal como hizo en el 2000 cortando violentamente la intercomunicación Occidente-Oriente e intentó hacer en 2019 (como hicieron antes y después su Maestro el Mallku contra La Paz y, mucho antes, Túpac Katari) para lograr —como en 2019— su único objetivo de vida: Volver al Poder al costo que sea necesario. La segunda es, paradójicamente, que esa fortaleza también muestra tanto su debilidad al tener que llevar a sus huestes cocaleras chapareñas para bloquear en otros lugares —obviemos los pagos por bloqueador— como que muy pocos otros sectores se han sumado a sus cierres —en realidad, no recuerdo de ningún otro, sobre todo ahora que la debilitada billetera del Estado ya no la tiene el exJefazo.

Y una tercera, entre muchas argüibles: ¿Qué sucederá en 2025? ¿Llegarán Morales Ayma y Arce Catacora a discutir el Poder? ¿Le darán al Señor de Orinoca sus bloqueos la inclusión en la boleta electoral? Y, desde la vereda opuesta: ¿tendremos una candidatura opositora potente (no digo unitaria porque parece una fantasía)? ¿Habrá un liderazgo opositor indiscutido y renovador o será más de lo mismo: los mismos candidatos fracasados, las mismas propuestas desgastada y demostradas inútiles?

Ahora mi pregunta para Usted, amigo lector que se debe haber preguntado la pertinencia por mi mención de Elmo: Viviendo el día a día de mi recuento, ¿no ha sufrido diariamente su salud emocional! ¿Su estabilidad mental no se ha afectado?

Y aún faltan casi dos años…


Referencias

https://cnnespanol.cnn.com/video/elmo-salud-mental-como-estas-experto-trax/

https://eldeber.com.bo/bbc/el-dia-que-elmo-nos-pregunto-si-estabamos-bien-y-desencadeno-una-masiva-catarsis-digital_355369     

https://es.statista.com/temas/10170/twitter-datos-mundiales/#topFacts

https://es.wikipedia.org/wiki/Elmo

https://plazasesamo.com/elmo/

https://twitter.com/elmo/status/1751995117366296904

https://www.bbc.com/mundo/articles/c4ndrpw4g2go

https://www.noticiasfides.com/nacional/sociedad/bloqueo-en-el-chapare-se-mantiene-invariable-y-esperan-armados-al-ejercito-209795

https://www.swissinfo.ch/spa/bolivia-tradiciones_el-cerco-indígena-a-la-paz-y-su-vínculo-con-la-fiesta-de-deseos-en-miniatura/47266172#